Llegamos al anochecer a Kanchanaburi y nos alojamos en Sugar Cane guest house por 300 THB en un bungalow con baño. Cenamos allí mismo y disfrutamos de la tranquilidad contemplando el río Kwai.
A la mañana siguiente de nuevo madrugón, esta vez para visitar el impresionante Erawan Park. Yo ya lo visité el año pasado pero no tuve ningún problema en volver ¡me encanta!
Para llegar cogimos el autobús local al lado del cementerio de Kanchanaburi.
Subimos los 7 niveles de cascadas, chapoteamos en sus pozas azules y nos deleitamos observando a los monos que se acercaban hasta nosotros y ellos observandonos a nosotros haciendo el mono jajaja. Lo pasamos genial, el parque Erawan nunca defrauda a los amantes de la naturaleza.
El viaje de vuelta se hizo pesado con el autobús abarrotado de gente, y eso que esto no había hecho nada más que empezar... todavía nos quedaban 3 horas para llegar a Bangkok, el sky train para llegar a la estación y que nos digan que hasta Diciembre ¡no hay trenes a nuestro próximo destino! Recorrer toda la línea del metro, pillar un taxi para llegar a la estación de autobuses , 10 horas en el autobús nocturno hasta Chiang Mai... y el minibús que nos acerca a Pai en 3 horas.
Dolor de cuerpo, cansancio... los viajes largos son agotadores pero ¡ya estamos en PAI!
A la mañana siguiente de nuevo madrugón, esta vez para visitar el impresionante Erawan Park. Yo ya lo visité el año pasado pero no tuve ningún problema en volver ¡me encanta!
Para llegar cogimos el autobús local al lado del cementerio de Kanchanaburi.
Subimos los 7 niveles de cascadas, chapoteamos en sus pozas azules y nos deleitamos observando a los monos que se acercaban hasta nosotros y ellos observandonos a nosotros haciendo el mono jajaja. Lo pasamos genial, el parque Erawan nunca defrauda a los amantes de la naturaleza.
El viaje de vuelta se hizo pesado con el autobús abarrotado de gente, y eso que esto no había hecho nada más que empezar... todavía nos quedaban 3 horas para llegar a Bangkok, el sky train para llegar a la estación y que nos digan que hasta Diciembre ¡no hay trenes a nuestro próximo destino! Recorrer toda la línea del metro, pillar un taxi para llegar a la estación de autobuses , 10 horas en el autobús nocturno hasta Chiang Mai... y el minibús que nos acerca a Pai en 3 horas.
Dolor de cuerpo, cansancio... los viajes largos son agotadores pero ¡ya estamos en PAI!
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